El Niño, El Arte y La Paz

Formar Generaciones para la Paz


PLANTEAMIENTO CONCEPTUAL

DEFINICIÓN DE LA INSTITUCIÓN

El Museo de los Vecinos es una institución que combina tres tipologías clásicas: la de museo de arte contemporáneo que alberga la obra pictórica del artista peruano argentino Arnaldo Molinari inspiradas en los Salmos de David; la de un museo comunitario, pues además de contar con la participación vecinal, a través de él esta comunidad de personas canalizan una serie de acciones orientadas a mejorar su entorno urbano y calidad de vida, y finalmente es un museo al aire libre pues se desarrolla integralmente en el espacio urbano.

Misión

Ofrecer al vecino, visitante, transeúnte, turista y público en general una aproximación y vivencia diferente del espacio público y del arte, intentando sensibilizar, exaltar y propiciar la convivencia social en paz a partir de la convivencia cotidiana con el arte.

Visión

Ser el primer museo en el Perú que a partir de la reformulación del espacio urbano genere el encuentro entre el arte y la comunidad de manera cotidiana, casual, durante las 24 horas del día.

Objetivo

El Museo de los Vecinos tiene como objetivo replantear la noción del espacio a partir de la interacción de dos valores fundamentales: la convivencia pacífica dentro de un espacio urbano y la interrelación en forma cotidiana y permanente de los vecinos con la obra de arte del artista Arnaldo Molinari, propiciando el acercamiento y diálogo entre los vecinos, el transeúnte y la comunidad en general, el desarrollo de la conciencia, el desarrollo de los valores individuales, familiares, de pertenencia vecinal y social.


HISTORIA DEL ENCUENTRO Y EL MUSEO DE LOS VECINOS

La historia del Encuentro y el Museo de los Vecinos se inicia en el año 2009, cuando motivado por realizar el Encuentro entre el Arte, la Vida y la Paz, Arnaldo Molinari coloca una obra suya junto a un mensaje de reflexión referido a un Salmo de David, en la calle, frente a su taller.

De inmediato, la atención de los vecinos generó un “encuentro” invisible, profundo y vivaz.

Esta reacción favorable de los vecinos, que se “encontraban” en el amor y la Paz que proponía la obra y los mensajes empujaron al Artista a continuar esta inspiración y se generó el “Encuentro” entre muchos vecinos que aún no se conocían.

Así en forma natural y espontánea, entorno a las obras de Arte, se organizaron los vecinos y el 19 de noviembre de 2009 la Municipalidad de Miraflores reconocía a estas calles con el nuevo nombre: “Calles de Luz y de Paz”.

Esta participación activa y vibrante de los vecinos hizo concebir al Artista, ya con una importante colección suya de Arte en las Calles de Luz y de Paz, una transformación del espacio y de sus calles en Museo. Museo en la vida cotidiana de un barrio.

Este crecimiento fue acogido por la Municipalidad de Miraflores y los vecinos creándose el Museo de los Vecinos (son el auspicio de la Embajada Argentina, la Cancillería del Perú, Naciones Unidas, Universidad Nacional Mayor de San Marcos), donde el valor humano de los vecinos, el Arte y la Vida, se desarrollarían en una cotidianidad inusitada.

Los vecinos desarrollan así la vida y existencia de este Museo, extendiendo y concretando todas sus aspiraciones en todos los campos: humanístico, cultural, social y económico, siempre con el claro objetivo del Desarrollo Humano a través de la Paz.

Historia de Encuentro, Historia de Inspiración, Historia de Vecinos, Historia de Amor, Historia de un Museo que se va construyendo hasta el infinito, día a día.

Miraflores, Julio 2011
María Eugenia Ilia
Museóloga


LOS VECINOS DE LAS CALLES DE LUZ Y DE PAZ

“Nosotros bendeciremos el nombre de la vida”.

Hay Paz, cuando hablamos sin criticar, comprendiendo con palabras buenas.
El barrio es la extensión de nuestra vida.

Esta vecindad de Miraflores, ha escogido la Paz como convivencia, en la alegría cotidiana del trabajo, del hogar, de la familia.
Nos ha unido nuestro despertar en el arte que ha interpretado nuestro vecino y artista.

El querer desarrollarnos en todos los aspectos materiales y espirituales, nos llevó a concordar y auspiciar este nuevo paso de desarrollo de nuestra vecindad con el generoso apoyo y liderazgo de la Municipalidad de Miraflores y su Alcalde.

Asimismo otras importantes instituciones se han sumado comprendiendo y auspiciando esta búsqueda permanente de mejorar un poquito más cada día nuestro barrio y nuestra comunidad.

Al salir y recorrer nuestras calles, cada uno de nosotros sentimos que es nuestra obra, la obra que propiciamos generosamente a través de la bondad, el cariño, el trabajo y la participación permanente.

Los Vecinos


MUSEO DE LOS VECINOS – HABEMUS MUSEO

El Museo de los Vecinos es un espacio sin puertas ni límites físicos establecidos, donde se gesta y fomenta la cultura y el arte contemporáneo a través de diversas actividades patrocinadas por una vecindad que apuesta por afianzar los valores de respeto, tolerancia y disfrute del espacio social. Su recorrido propone una experiencia singular, en él las fachadas y calles cumplen diferentes roles y se convierten en salas de exposición y ofrecen los servicios que los visitantes esperan, pero dentro de un barrio o espacio urbano de tránsito permanente.

La vida cotidiana de un barrio instalada dentro de un Museo de Arte, o un Museo de Arte instalado en las calles de un barrio.

El Museo de los Vecinos, se originó en el año 2009, a partir de la iniciativa personal de Arnaldo Molinari, artista peruano-argentino, que a contrapelo de las tendencias de las artes visuales contemporáneas, explora el tema de la paz y los valores que enriquecen la vida del individuo, enalteciéndolos como lo más importante de su proceso creativo. Paradójicamente a través del museo, Molinari parece completar una singular analogía que ha definido su trayectoria de artista disidente, por un lado, el hecho de abandonar los límites tradicionales del marco de la pintura y de algunas convenciones plásticas; y por otro, el escaparse del espacio delimitado de la galería y buscar nuevos espacios sociales de exhibición.

Molinari, ha puesto la primera piedra para consolidar un lugar que afiance las relaciones de la vecindad como valor humano y social de integración, inclusión y tolerancia, que propicie el contacto interpersonal a través de vínculos estrechos entre sus miembros, pero que a la vez que sea un lugar de recepción de proyectos visuales que acerquen el arte contemporáneo y la experiencia estética al ciudadano de a pie, a través de exposiciones temporales y otras actividades que lo convertirán en un espacio dinámico de diálogo e intercambio.

El Museo de los Vecinos pone a prueba la concepción tradicional del museo, reclamando su renovación y replanteando el estrecho vínculo museo, territorio y sociedad. Esta mirada sin embargo, apuesta por la vigencia del museo como institución que gestiona la cultura y a través de ella los valores que aseguran el desarrollo integral del individuo.

Lic. María Eugenia Ilia
Museóloga


LA OBRA DE ARNALDO MOLINARI

Desde hace siete años con un trabajo artístico ininterrumpido Arnaldo Molinari realiza construcciones espaciales con colores y texturas, gestos y signos, que van constituyendo un lenguaje. En una especie de viaje iniciático el artista vuelve a repetir los rituales antiguos para acercarse paulatinamente al Reino de la Luz.

En ella podemos observar un desarrollo espiritual paralelo a su proceso creativo en cada etapa o período de su producción artística. Sus emplazamientos dimensionales de marco irregular geométrico, estructuran un campo de superficies flotantes, en el cual se visualiza un relato, una narración.

La obra de Molinari propone que entre el arte y la vida existen nuevas implicancias que deben contemplarse y explicitar sus efectos sobre la ruptura de un marco institucional para crear un espacio de referencia cuya libertad consiste en no limitar un espacio restringido para el arte, sino liberarlo de sujeciones estrictas y programadas.

En la necesidad de expresar su experiencia espiritual en el encuentro con el alma, a través de la forma, el color, el gesto y la materia articulada, vemos la vocación y el deseo del artista de formular sus propósitos estéticos a esa comunidad a la que pertenece y destina ese hacer.

En su necesidad íntima, busca un destinatario, y es en este proyecto, que sale desde el interior al aire libre, donde el artista Arnaldo Molinari va a proponer el hombre que se detiene a contemplar las obras, una conversación amable, un discurso realizado en homenaje a sus dos terruños, Perú y Argentina y conmemorando la amistad entre estas dos naciones en las cuales se asientan las voluntades de confraternidad, expone e integra sus obras en el barrio de Miraflores-Perú y Haedo-Argentina.

Esta travesía temporal entre dos lugares distantes es el espacio en el cual el artista ha creado una construcción espiritual y artística simultáneamente. El arte recupera el sentido sagrado de la naturaleza divina. Ha sido primeramente “la Fábrica”, el espacio de trabajo que fue recuperado en Buenos Aires, en la calle Querandíes, para un espacio cultural de libres expresiones multidisciplinarias, ése ha sido el primer indicio de la fuerza desplegada en una obra que sembró en su recinto un bosque que, con el tiempo se ha ido desgajando para sembrar nuevos plantíos.

Las obras, los carteles y señales de MoIinari cumplen su objetivo por su claridad y eficacia en cuanto a sus mensajes. Es el signo de nuevos tiempos para hablar de la necesidad de ver cómo se pueden convertir, en la experimentación artística de sus obras, al aire libre, un imaginario repleto de nuevas aristas imaginativas.

Rosa Faccaro
Asociación Internacional
de Críticos de Arte


MUSEO DE LOS VECINOS

Estas 7 cuadras que en forma conjunta la Municipalidad de Miraflores, los vecinos y el artista plástico Arnaldo Molinari han transformado en un espacio de convivencia cotidiana con el Arte, las flores, las plantas, el color y las luces, con un concepto unificado en un sentido espiritual y artístico, referenciadas todas las obras de arte a la Paz y los Salmos de David.

Caminar por las calles de Luz y Paz es ingresar a un espacio invisible que nos conecta con el Alma a través del Viaje de los Árboles.

En este espacio se encuentra localizado el Museo de los Vecinos.

El vecino y el transeúnte redescubren el arte y la obra a cada instante, como algo nuevo, las 24 horas del día, los 365 días del año.

El autor de la presente propuesta, que incorpora el arte a la vivencia cotidiana, es el artista plástico Arnaldo Molinari apoyado cálidamente por sus queridos vecinos, quienes forman parte del proyecto aportando su voluntad, su comprensión, además de las fachadas y jardines de sus casas.

Asimismo, la Municipalidad de Miraflores adoptó este proyecto y lo hizo crecer y desarrollar ubicándolo en un lugar de importancia en su jurisdicción.

Este Museo ha sido ejecutado con riguroso criterio profesional y artístico, logrando un resultado de apreciable calidad, que suscita la sorpresa del paseante, su contemplación, así como el orgullo y satisfacción de los vecinos y el Municipio.

Es importante destacar que existe una temática preponderante en el recorrido de este espacio: La Paz.

José Zapata
Escritor


ARNALDO MOLINARI

El temperamento apasionado de Arnaldo Molinari aparece reflejado con inusitado vigor en su obra. Es importante destacar en ella la factura nerviosa y el trazo grueso cargado de empaste que confiere al conjunto una palpable densidad. De este modo el pintor manifiesta su estado de ánimo y lo expresa utilizando colores contrastados como una respuesta a un mundo regido por el caos y el desconcierto.

El artista opta por soluciones un tanto individuales que conectan con la estilística de la angustia y el deterioro, el gusto por construir mediante materiales no convencionales a lo propiamente pictórico.

Existe una manifiesta rebeldía en la actitud de Molinari. Esa rebeldía se patentiza cuando utiliza las manos que significa un acercamiento a la materia para lograr surcos, grietas en la superficie pintada o bien los incesantes gestos creando angustiosos tramados circulares que buscan la consonancia con las mutaciones constantes del universo, de las personas y las situaciones.

El aire rojo fluye atexturado en analogía a las corrientes de las formas que se arremolinan independientes no como meras abstracciones sino como clara representación de la energía de la creación que atraviesa el tiempo y el espacio.

Muchas veces se ha planteado la relación de conjunto del arte gestual con la filosofía existencialista y más aún con las ideas relativas a la nada propuestas por Heidegger. En cualquier caso el arte es la respuesta dada por el artista a la problemática de su tiempo. En este caso Molinari es protagonista esencial de una época signada por la destrucción de los valores de la humanidad.

Jorge Bernuy
Crítico de Arte
Lima-Perú

Personajes y sus Biografías